EL LUGANO
El
Lúgano es un pequeño Carduelis de unos
El
macho adulto presenta el píleo negro desde el borde dorsal del pico hasta la
nuca, donde el negro se va convirtiendo en verde , color que se prolonga por
toda la espalda donde además aparecen pequeñas listas oscuras de origen melánico.
La cejas son amarilla intensa (pigmentación lipocrómica) así como la garganta y
las partes laterales del cuello. La mejilla es verde aceituna, intensificándose
el la parte más caudal. El mentón posee una mancha de color negro no muy
pronunciada. El pecho presenta su base amarilla, clareándose el abdomen hasta
llegar al blanco de la cloaca. muestras listas melanicas en las partes laterales
y pierden intensidad hacia el centro desapareciendo. El obispillo se muestra
amarillo intenso y limpio. En las alas, las cobertoras superiores y las plumas
verdosas, pero las cobertoras inferiores son negras en la base y amarillas en la
punta originando una ancha franja amarilla en la parte media del ala típica de
los luganos y otros carduelis.
Su
hembra es más pálida que el macho, ya que el color amarillo base se atenúa e
incluso llega a desaparecer en el pecho y en otras zonas concretas. La
distribución melánica es similar a la del macho, presentando algunas diferencias
y marcándose mas a no poseer tanto lipocromo amarillo. No presenta mancha negra
en el píleo, ni en el mentón pero si listas mas oscuras.
Los
jóvenes tienen la cabeza y dorso pardo fuertemente listados en negro. También
presentan raya detrás de los ojos. La garganta y los lados del cuello son
blanco-amarillento punteados de negruzco. El pecho y el vientre los presentan
listados. Las alas son prácticamente iguales a las de los adultos pero con tonos
más apagados y con melaninas menos negras.
Zonas frecuentes:
al
ser un pajaro migratorio caprichoso cada año se distribuye de diferentes zonas
Alimentación
El lúgano se alimenta como todos los fringílidos, de una
dieta principalmente granívora. Esta especie es capaz de adaptarse sin problemas
a cualquier cambio en su alimentación en libertad, este se puede alimentar de
casi cualquier tipo de semilla, alimentándose en los árboles, y en el suelo como
(el verdecillo- serinus, serinus).
En primavera esta ave basa su dieta en las semillas de las coníferas, comiendo
también yemas tiernas e incluso algún pequeño insecto que le proporcionan a sus
pichones. Entre las coníferas: la pícea (Picea abies), el abeto (Abies alba), el
alerce (Larix decidua), el pino (Pinus sp), el cedro (Cedrus sp). y otros como
los álamos (Populus sp) y los olmos (Ulmus carpinifolia) de los que come las
yemas tiernas que se abren. También durante la primavera obtiene alimento de
algunas plantas herbáceas ya conocidas como los cardos estrellados (Centaurea
calcitrapa) y el alsine (Stellaria media).
En otoño continúan sus movimientos por las zonas húmedas
adaptando su alimentación conforme a las emillas que plantas herbáceas, bayas en
flor y "malas hierbas" a ras de suelo.
Reproducción
Entre Enero, Febrero incluso Marzo, se van definiendo
las parejas para reproducirse, el cortejo del macho descolgando sus alas,
hinchando el pecho, erizando las plumas de la cabeza, sin parar de cantar y
volando de árbol en árbol.
La cría se lleva a cabo en coníferas, el nido es construido por la hembra a gran
altura y en el extremo de alguna rama. Mientras tanto, el macho la acompaña
cantando, construyendo el nido en forma de pequeña taza con ramas finas con
líquenes, lana y musgo, tapizada con pelo, plumón, raicillas y pequeñas plantas.
La puesta comienza a mediados de abril y pone de 3-6
huevos. Estos son brillantes, de color blanco-azulado o grisáceo y con motas
finas, rosadas. La puesta se realiza a intervalos de 24 horas y preferentemente
en el crepúsculo.
La incubación, tarea exclusiva de la hembra, comienza con la puesta del
penúltimo huevo y dura 11-14 días. En ese período el macho alimenta a la hembra
con bastante frecuencia.
Las pollos presentan plumón grisáceo. La alimentación de las crías durante los
primeros 5-6 días la realiza la hembra mientras el macho trae el alimento
(semillas, insectos y pequeñas piedrecillas). mas adelante los dos se encargar
de la alimentación de las crías que permanecen 13-15 días en el nido. Cuando lo
abandonan están a mitad de emplumar. Durante 2-3 días permanecen posados en
ramas próximas al nido. Al mes de vida las crías, ya completamente emplumados,
se reúnen en bandos en busca de comida. Los adultos emprenderán una segunda
puesta que ha de acabar sobre julio.
Estudio
sobre la cría del Lugano (Carduelis spinus) y sus nuevos colores
Jean-MIchel JM EYTORFF
Comisión Internacional
O.M.J (C.O.M) Fauna europeo e Hibrida
Responsable de Sección
Fauna Europea e híbrida del C.N.J.F
Traducción a
Castellano: Carduelisur. Paco Pi.
Cuando en los años 70 aparecieron las
primeras mutaciones en el fenotipo del lugano, pocos criadores imaginaban que
este simpático Fringílido presentaría después de algunas décadas tal diversidad
de colores. El trabajo, la selección, la curiosidad de los criadores de la
especialidad contribuyes extendiendo la gama de las variedades domesticadas, y
hacen al Lugano, la especie más interesante que hay que mantener cuando se desea
combinar el placer del criar y la búsqueda genética.
Permítame hacer una pequeña reseña
histórica de las mutaciones aparecidas en esta especie.
La primera mutación descubierta fue
como en muchas especies, la mutación bruna factor vinculado al sexo y recesiva.
Fue un criador neerlandés, Dick den Hood, hizo la adquisición de un sujeto verde
que presentaba una dilución de eumelanina que llamó "pastel". Los acoplamientos
realizados con esta mutación demostraron que el factor "pastel" era dominante
autosomica y no vinculado al sexo y recesivo como es el pastel del canario.
Muchos años más tarde,
La combinación del bruno con verde
diluido, permitió obtener por selección el bruno diluido. El acoplamiento macho
Verde diluido X hembra bruna efectivamente da jóvenes hembras verdes diluidas y
verdes, y los jóvenes machos verdes portador de bruno y verde diluido portadores
de bruno. Son estos verdes machos diluidos portadores de bruno quienes
permitieron obtener a los primeros bruno diluidos. Para recordar el acoplamiento
macho verde diluido portador de bruno X hembra bruna, da hembras: verde, verde
diluidas, brunas diluidas y brunas. Y machos: verde portador de bruno, verde
diluido portador de bruno, bruno, y bruno diluido.
En esta época muchos pensaban que la
cruzando ejemplares dominante autosomico X dominante autosomico podria producir
factor letal en los jóvenes basándose en los conocidos casos de acoplamiento
dominante X dominante (o el caso del factor moñudo (en el gloster). Era un
error, porque siempre gracias a la curiosidad de ciertos criadores, la
combinación verde diluido X verde diluido dio origen a los primeros Dobles
diluidos verdes. Bastaba luego con emparejar bruno diluido X bruna diluida para
obtener el Doble diluido brunos, lo que no tardó mucho.
El tiempo pasó, y un sujeto hembra en
mutación ágata factor vinculado al sexo y recesivo), no tardo en aparecer en un
criadero. Esta novedad ocasionó el paso de una nueva etapa. La combinación del
bruno con ágata dio verdes portadores de ágata y de bruno. El crossing over y la
posibilidad provocó el nacimiento de una nueva mutación: el isabela.
La continuación es conocida, y
tenemos en lo sucesivo en criadero, una gama impresionante de mutaciones de
colores: el bruno, el ágata, el isabela, el verde diluido, el bruno diluido, el
ágata diluido, isabela diluido, el verde Doble diluido, el bruno Doble diluido.
En 2003, después de ya muchos años de
experimentos con el lugano en mutaciones (empecé su cria en mutaciones en 1978,
y publicado hace algunos años en « Las aves del mundo » artículos sobre el
estudio del lugano en mutaciones de colores), decidía perseguir la aventura e
intentar la obtención de un sujeto doble diluido ágata, incluso un Doble diluido
isabela. Hasta entonces los diferentes cambios que había podido tener con otros
criadores experimentados, dejaban ver posibilidades débiles de éxito. Hablábamos
de mortalidad en el huevo y la fragilidad de los embriones, de la mortalidad al
nacimiento, del comportamiento entre los jóvenes.
Emparejando macho ágata diluido
portador de isabela con una hembra isabela diluida, me decídí que con poca
posibilidad. Y en criadero, independientemente de la calidad de las
instalaciones, de la cepa, de la alimentación. Del tiempo consagrado a la
observación, también hace falta la suerte.
Con mismo espíritu, emparejaba un
macho isabela diluido con una hembra isabela diluida con el fin de obtener
Dobles diluidos isabela. De esta pareja, obtuve 2 nidadas y algún joven. Cuando
los huevos fueron fecundados, los jóvenes morirían en el huevo.
La pareja ágata diluido X Isabel
diluido me dio una primera nidada de 5 huevos a finales de abril, todo claro. La
infecundidad de estas primeras nidadas era total en las jóvenes aves. En mayo,
la hembra isabela diluida empezó de nuevo la segunda puesta. Sobre los 4 huevos
depositados en el nido, dos parecían fecundos, pero prefería no alejarme
demasiado del control del nido a causa del nerviosismo de los padres.
Después de 13 días, el primer trozo
de huevo en el suelo. Debí tener paciencia hasta el día siguiente para hacer un
control del nido porque la hembra no movía una pluma. Con un espejo, podía
observar a dos pollitos particularmente claros (piel y plumón). Pensaba que eran
isabelas en diluidos. A 7 días, en el momento del anillamiento, me decía que
efectivamente tenía dos isabela diluidos y que todavía habría que tener
paciencia para ver un Doble diluido ágata o un Doble diluido isabela. Anillados
ya hacia las 19 horas, las anillas son recubiertas con esparadrapo, y limito así
los riesgos del tirar a los jovenes. Confiado, porque esta práctica
prácticamente me da el 100 % de éxito, pasaba hacer un control de la pajarera un
cuarto de hora más tarde. Y mi gran desconcierto, ambos jóvenes tirados por
tierra, con anillas, los padres los había echado del nido, no podían quitar los
anillos de aluminio. Reponía a los jóvenes en el nido, y esperaba una decena de
minutos. La hembra reposaba sobre el nido. Pensaba que este incidente estaba sin
consecuencias. Por experiencia de conciencia volvía a pasar un cuarto de hora
más tarde. Los jóvenes estaban de nuevo en el suelo, pero esta vez, comprobaba
que las patas habían sido quebrantadas. Los padres que no podían quitar la
anilla a los jóvenes se habían ensañado con las patas. Pensaba entonces que todo
estaba estado perdido. Sin embargo, no bajando los brazos, decidía cortar las
anillas, desinfectaba las heridas, reponía las patas con relación a las
fracturas y colocaba a los jóvenes en el nido velando a conservar la alineación
de las patas. Sabía que la consolidación de los cartílagos era rápida entre las
jóvenes aves, pero debo reconocer que en este momento verdaderamente no creía en
eso, y prácticamente hacía una cruz sobre mis isabelas. Los jóvenes fueron
aceptados y conservados al nido, quedaba pues esperar.
Los días pasaron, y los jóvenes
estaban siempre en el nido y en vida, porque de cuando en cuando, podía percibir
su cabeza cuando la hembra les alimentaba.
A los quince días, contra toda
previsión, el primer joven salió del nido, sin presentar deformación a las
patas. El día siguiente, el segundo joven también era sobre la percha, inmóvil.
La hembra tenía la mania de arrancar las plumas a los jóvenes para tapizar con
eso el fondo para la siguiente puesta. La apariencia de los jóvenes era la de
dos isabelas, pero comenzaba a plantearme algunas cuestiones observando la
presencia de un color gris carbón a la extremidad y rémiges y las timoneras en
curso de crecimiento. En el curso de los días, las plumas de la espalda brotaban
pero con una dominante gris verde, me decía que mis "isabelas" eran más bien
unas ágatas. A parte de la espalda, el conjunto del plumaje a dominante amarilla
había estriado de gris claro.
Después del destete y sobre todo la
muda, tenía la confirmación que no había criado isabelas. Uno de ambos jóvenes
estaba a dominante amarilla, con estriados grises y una espalda gris verdusca,
el otro era diferente y presentaba más melanina y menos de lipocromo. El primer
joven era un Doble diluido ágata, el otro joven es una mutación en curso de
identificación. Ambas jóvenes eran hembras. Los resultados eran espectaculares y
demostraban que el acoplamiento Ágata diluido X Isabel diluido podía producir
Ágata dobles diluidas, con poca posibilidad.
Después de 2003, la temporada 2004,
fue el año de los experimentos con marfil y tuve la posibilidad de ver nacer en
mi criadero de los sujetos marfiles, marfiles diluidos y marfiles dobles
diluidos.
La temporada 2005, fue a la imagen de
las temporadas 2004 y 2003, rico en emoción y en sorpresas, juzgue por usted
mismo:
Mi objetivo en efecto, era conseguir
nuevos colores combinando el factor marfil con las mutaciones clásicas
reconocidas por el C.O.M, el bruno, por el Ágata, Isabel, o todavía el factor
diluido.
Acoplamientos fueron realizados en el
momento del período invernal, y entre otras cosas algunos parejas como:
• Verde Macho (fenotipo clásico)
portador de isabela, de bruno, de ágata y de marfil X hembra marfil
• Verde Macho (fenotipo clásico)
portador de isabela, de bruno, de ágata y de marfil X hembra marfil diluida,
• Verde Macho diluido y portador de
isabela, de bruno, de ágata y de marfil X Hembra marfil diluida
Para recordar:
El isabela, el bruno, el ágata y el
marfil son unos factores recesivos y vinculados al sexo
El factor diluido es dominante
autosomico.
• El acoplamiento macho Verde
(fenotipo clásico) portador de isabela, de bruno, de ágata y de marfil X hembra
Marfil
Puede en efecto dar los resultados
siguientes a condición de obtener un crossing over, lo que esta lejos de ser
garantizado:
Para informar el crossing over es el
cambio de segmentos entre dos cromosomas emparejados, provocando un cruzamiento
itercromosómico. En este caso dos caracteres que dependen del mismo cromosoma
pueden entonces separarse. A la inversa, dos caracteres que dependían de dos
cromosomas diferentes pueden reencontrarse ligados.
Jóvenes hembras:
Verde
Isabel
Bruno
Ágata
Marfil
Isabel marfil
Bruno marfil
Ágata marfil
Jóvenes machos:
Verde (fenotipo clásico) portador de
marfil
Marfil
Verde (fenotipo clásico) portador de
isabela, de bruno, de ágata y de marfil
Verde (fenotipo clásico) portador de
bruno y de marfil
Verde (fenotipo clásico) portador de
ágata y de marfil.
• El acoplamiento macho Verde
(fenotipo clásico) portador de Isabela, de bruno, de ágata y de marfil X hembra
Marfil diluida
Jóvenes
hembras:
- verde
- Isabel
- bruno
- ágata
- marfil
- Isabel marfil
- bruno marfil
- ágata marfil
- verde diluida
- Isabel diluida
- bruna diluida
- ágata diluida
- marfil diluida
- Isabel marfil diluida
- bruno marfil diluida
- ágata marfil diluida
Jóvenes machos:
- verde (fenotipo
clásico) portador de marfil
- marfil
- verde (fenotipo
clásico) portador de Isabela, de bruno, de ágata y de marfil
- verde (fenotipo
clásico) portador de bruno y de marfil
- verde (fenotipo
clásico) portador de ágata y de marfil.
- verde diluido
portador de marfil
- marfil diluido
- verde diluido
portador de Isabela, de bruno, de ágata y de marfil
- verde diluido
portador de bruno y de marfil
- verde diluido
portador de ágata y de marfil.
El abanico de posibilidades
teóricamente es impresionante. Hace falta sin embargo siempre mucha suerte y
siempre contar con crossing over.
• El acoplamiento macho verde diluido
portador de Isabela, de bruno, de ágata y de marfil X hembra Marfil diluido
Puede en efecto dar los resultados
siguientes, a condición siempre de obtener un crossing over en cuanto al factor
marfil (isabela marfil, bruno marfil, ágata marfil, isabela diluida marfil,
ágata diluida marfil, bruna diluida marfil):
Jóvenes hembras:
- verde
- verde diluida
- Isabel
- Isabel diluida
- bruno
- bruno diluida
- ágata
- ágata diluida
- marfil
- marfil diluida
- Isabel marfil
- Isabel marfil diluida
- bruno marfil
- bruno marfil diluida
- ágata marfil
- ágata marfil diluida
- Doble diluida verde
- Doble diluida bruno
- Doble diluida ágata
- Doble diluida Isabela
- Doble diluida marfil
- Doble diluida bruno
marfil
- Doble diluida ágata
marfil
- Doble diluida Isabela
marfil
Jóvenes machos:
Verde (fenotipo
clásico) portador de marfil
Marfil
Verde (fenotipo
clásico) portador de isabela, de bruno, de ágata y de marfil
Verde (fenotipo
clásico) portador de bruno y de marfil
Verde (fenotipo
clásico) portador de ágata y de marfil.
Marfil diluido
Verde diluido portador
de isabela, de bruno, de ágata y de marfil
Verde diluido portador
de bruno y de marfil
Verde diluido portador
de ágata y de marfil.
Doble diluido marfil
Doble diluido verde
portador de isabela, de bruno, de ágata y de marfil
Doble diluido verde
portador de bruno y de marfil
Doble diluido verde
portador de ágata y de marfil.
Doble diluido verde
portador de marfil
Desde luego, hay una teoría y una
realidad, y el factor suerte debe intervenir para que las nuevas mutaciones
aparezcan.
Tuve esta suerte porque algunos
sujetos nacieron en mi criadero. Las nuevas mutaciones como el bruno diluido
marfil, el bruno marfil, el Doble diluido marfil y sobre todo el Doble diluido
ágata marfil son fijadas en lo sucesivo; usted encontrará adjunto algunas fotos
que representarán ciertos sujetos en color después de la muda juvenil.
Para haberlos observado en criadero o
criado personalmente, las mutaciones siguientes existen en lo sucesivo en el
fenotipo del lugano Carduelis spinus:
• Bruno
• Ágata
• Isabel
• Verde diluido
• Bruno diluido
• Ágata diluida
• Isabel diluida
• Doble diluido verde
• Doble diluido moreno
• Doble diluido ágata
• marfil
• Bruno marfil
• Ágata marfil
• Marfil diluido
• Bruno diluido marfil
• Ágata diluida marfil
• Isabel diluida marfil
• Doble diluido marfil
• Doble diluido moreno
marfil
• Doble diluido ágata
marfil
Todavía no tuve la posibilidad de
contemplar el Doble diluido Isabela, el Doble diluido Isabela marfil, e Isabel
marfil, pero esto ciertamente no tardará, y por qué no desde la temporada 2006.
Queda soñar con
descubrimiento de la mutación azul que dará todos los colores ya fijados con
factor blanco. Porque el marfil es llamado sin razón "azul". Espero que un día
aparezca en una de nuestros criaderos.